¡Únete al grupo de valientes aventureros! ¡Explora una mazmorra llena de monstruos, trampas y tesoros! En Dungeon Raiders, cada jugador toma el papel de un aventurero diferente. Tendréis que trabajar juntos para sobrevivir en la mazmorra, pero sólo uno de vosotros conseguirá salir con la mayor cantidad de tesoro posible y ganar el juego. La mazmorra es diferente cada vez que juegas, ofreciendo nuevas sorpresas a medida que avanzas por ella.
Dungeon Raiders es un juego diseñado por Phil Walker-Harding, e ilustrado por Albert Monteys, que publica Devir Iberia, a quienes aprovechamos para agradecer el habernos facilitado amablemente una copia para la reseña.
El juego está diseñado para jugar de 3 a 5 jugadores, de más de 8 años, y tiene una duración sugerida de 20 minutos por partida, aunque acostumbran a ser superiores a 30 minutos.
La caja del juego es de tamaño mediana (175x130x40mm), sin inserto en su interior para organizar los componentes pero con tantos contadores que una vez destroquelado es difícil que el contenido se mueva en el interior.
A continuación os listamos el contenido del juego:
- 102 Cartas:
- 7 Cartas de Nivel
- 30 Cartas de Habitación
- 25 Cartas de Poder
- 24 Cartas de Objeto
- 10 Cartas de Monstruo Final
- 5 Cartas de Personaje
- Carta de Mapa
- 38 Monedas:
- 24 de Valor 1
- 14 de Valor 5
- 26 Heridas:
- 20 de Valor 1
- 6 de Valor 5
- Reglamento
Compartimos un vídeo que hemos preparado con el unboxing del juego.
En Dungeon Raiders los jugadores interpretan el papel de un aventurero, de entre los diferentes arquetipos mazmorreros, trabajando juntos para sobrevivir en la mazmorra, aunque sólo uno conseguirá ganar saliendo con la mayor cantidad de tesoro posible.
Mecánica
En la configuración inicial de la partida se prepara los diferentes mazos de habitaciones, los de niveles, siguiendo las indicaciones del manual, y se coloca la reserva de objetos, monedas y heridas. Después, cada jugador recibe aleatoriamente un personaje y recibe las cartas de objeto, monedas y heridas indicadas en la carta de su personaje, así como un juego de cartas de poder con valores del 1 al 5.
La partida se desarrolla durante 5 niveles de mazmorra que son representadas por una fila formada por 5 cartas de habitación. Para la creación de un nivel, primero se revela la carta superior del mazo de niveles y, seguidamente, se van colocando las 5 cartas de habitación siguiendo el esquema de nivel, colocando boca arriba las cartas de símbolo verde y boca abajo las del símbolo rojo. En cualquier momento de la partida, los jugadores pueden hacer uso de la carta de antorcha para mirar en secreto una de las cartas de habitaciones que se encuentre boca abajo.
Durante la partida los jugadores entran en las diferentes habitaciones, una a una, de izquierda a derecha. Si la carta se encuentra boca abajo, justo antes de entrar se coloca boca arriba para que los jugadores conozcan lo que se encuentra en su interior. Al entrar en la habitación, los jugadores deben escoger una de sus cartas de poder numeradas del 1 al 5, para representar la acción de sus personajes. En cualquier momento, pueden usar la carta de bola de cristal para esperar a resolver las cartas de los diferentes jugadores, antes de escoger su correspondiente carta de poder. Al finalizar un nivel, los jugadores recuperan su cartas de poder y se prepara el siguiente nivel.
Las habitaciones del interior de cada nivel de mazmorra se resuelven de formas diferentes. En las habitaciones con tesoro gana la carta de poder más alta, en las que haya monstruo el valor de la suma de todos deben derrotar al monstruo o el jugador con la carta más baja recibe heridas, en la cámara cada jugador obtiene un beneficio particular, en la de trampa el jugador con más monedas o más heridas puede perder alguna de estas y, al final del último nivel, la carta de monstruo final que se resuelve de una manera un tanto más especial que los monstruos comunes aparecidos en los diferentes niveles de la mazmorra.
El objetivo del juego es ser el jugador en conseguir más monedas de oro, evitando ser el que más heridas se haya llevado durante la partida, ya que al final de la partida el jugador que más heridas tenga representa que se desmaya perdiendo cualquier opción a ganar. De entre los que quedan si desmayarse, el jugador con más monedas gana la partida.
El manual explica una variante de juego para hacerlo más táctico, en la que se escoge un jugador inicial, que va rotando para cada nivel, en la que se colocan las cartas de poder boca arriba en sentido horario a partir del jugador inicial y, una vez colocadas todas, se resuelve de la manera habitual.
Opinión
Dungeon Raiders es un juego tipo filler temático con mecánica gestión de mano mezclada con faroleo, en el que a priori parece que no vayamos a tener que pensar mucho pero que a medida que avanza la partida descubrimos que debemos escoger pensando en las opciones que disponemos, tanto de beneficiarnos o perjudicar a los otros jugadores.
El nivel de interacción entre jugadores es sutil pero existente, el poder robar las monedas al entrar a una habitación con tesoro o perjudicar a otros jugadores en combates contra monstruos, son factores que añaden bastante enjundia táctica. En cuanto a los entreturnos, el hecho de ser acciones simultáneas, hace que sean inexistentes.
La rejugabilidad es buena, hay bastantes combinaciones posibles de cartas, para formar diferentes niveles de mazmorra, además del sistema de creación de los mazos que descarta cartas de niveles y habitaciones extra, que permitirá que aparezcan en otras partidas creando escenarios diferentes.
El aspecto estético del juego es estupendo, con simpáticas ilustraciones de los arquetipos mazmorreros que le dan un aspecto muy divertido al juego.
Después de haber jugado durante mucho tiempo a versiones anteriores a esta remasterización del juego, pensamos que es un fantástico juego en su categoría de filler de puteo, un jueg ágil de jugar y fácil de explicar que, por su sencilla mecánica, podemos recomendarlo como juego familiar, para jugarlo en sobremesas o con los más pequeños de la casa, y como juego introductorio para los menos habituados a juegos de mesa modernos.
Espero que hayáis disfrutado de la entrada tanto como yo, hasta la siguiente entrada…
¡Únete al grupo de valientes aventureros!